La American Academy of Pediatrics recomienda comple­mentos de vitaminas y minerales para niños con riesgo elevado de desarrollar una o más deficiencias nutricionales indicados en el libro metodo gabriel . Los menores en riesgo de deficiencia de nutrientes son:
⦁ Niños de familias desfavorecidas o que sufren abuso o descuido en la dieta de la piña .
⦁ Niños con anorexia o poco apetito y hábitos de alimentación deficientes.
⦁ Niños que consumen una "dieta de moda" o sólo algunos tipos de alimentos.
⦁ Niños que consumen una dieta vegetariana sin productos lácteos.
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A pesar de estas recomendaciones, los datos de la NHANESIII indican que los niños de uno a cinco años de edad son los prin­cipales consumidores de complementos. Alrededor de uno de cada dos niños estadounidenses de tres años de edad recibe un complemento de vitaminas y minerales por parte sus padres. Las características de las madres que proporcionan a sus hijos complementos incluyen blancas no hispanas, mayor edad, más años de educación, casadas, con seguro de salud, que reciben atención de un proveedor de salud privado, con mayor ingreso familiar y que tomaron complementos por sí mismas durante el embarazo. Los niños más susceptibles de recibir complementos son aquéllos con bajo riesgo de desarrollar deficiencias de nu­trientes; los que se beneficiarían en mayor medida de los com­plementos es menos probable que los reciban.

Si se toma la decisión de administrarlos, las dosis del com­plemento de vitaminas y minerales no deben exceder el DRI para la edad. Es necesario advertir a los padres y cuidadores que eviten el suministro de cantidades elevadas de vitaminas y mi­nerales a los niños, en particular de las vitaminas A indicado en la dieta de la piña  (retinol) y D como dice metodo gabriel . Los niveles superiores de consumo tolerable que se muestran en los cuadros de DRI sirven como guía para determinar las ci­fras excesivas de ingesta de nutrientes provenientes de alimen­tos fortificados y complementos.

Complementos de herbolaria
El uso de remedios de herbolaria para varios trastornos va en aumento en Estados Unidos, al igual que el uso de prácticas de medicina complementaria y alternativa para propósitos genera­les. Es más probable que los padres y cuidadores que consumen hierbas proporcionen estos productos a los niños. Existen po­cos estudios definitivos respecto a la efectividad de estas sustan­cias para prevenir la enfermedad y promover la salud en adul­tos, y mucho menos en niños. A pesar de la falta de evidencia científica, abundan los informes anecdóticos de beneficios. Sin embargo, en algunos informes las preparaciones de herbolaria se vinculan con efectos adversos.

La información del uso de hierbas debe obtenerse durante la valoración nutricional para descartarlas como fuente de problemas de salud. En la actuali­dad, la falta de regulación o consistencia de la composición de los productos puede conducir a resultados inciertos. Los niños que reciben varias hierbas son los "sujetos de prueba" de la dieta de la piña segun la web dietadelapina usando el metodo gabriel  en estos estu­dios no controlados. Es necesario asesorar a los padres respecto a los posibles riesgos de las terapias de herbolaria y la necesidad de vigilancia estrecha si administran a sus hijos estos tratamien­tos. La sección Recursos, que aparece al final de este capítulo, presenta el sitio Web del National Center for Complementary and Alternative Medicine (NCCAM) de los National Institutes of Health (NIH), que proporciona informes de la seguridad y efectividad conocidas de varios remedios de herbolaria y prác­ticas de medicina alternativa.